Max Planck, en la foto, abrió la caja de pandora de la Física con sus teorías sobre la llamada radiación del cuerpo negro, uno de los experimentos ideales donde la física conocida, llamada despues por oposición clásica, fracasaba estrepitosamente. Aplicando sus deducciones sobre la cuantización de la materia y la energía (que son la misma cosa) y apoyado en las teorías sobre la incertidumbre de Heisenberg formuló su mítica teoría cuántica de la radiación del cuerpo negro, la famosa Ley de Planck. Desde ahí, Niels Böhr, Albert Einstein, Paul Dirac, Louis de Broglie o Erwin Shrödinger entre otros levantaron el, posiblemente, edificio teórico más bello y eficaz de la historia de la ciencia y quizá también el más alejado de la intuición: la Mecánica Cuántica. La dificultad de entender los principios de la teoría que mejor responde a las experimentaciones, la que mejores predicciones produce ya la subrayaba Planck cuando dijo a un alumno suyo que decía creer empezar a entenderla 'si cree usted que empieza a enterderla es que realmente no la entiende' incluso se dice que Shrödinger, el padre de la ecuación de la física mas bonita, con permiso de E=mc2 y auténtico arquitecto del edificio cuántico, afirmaba 'odiar la física cuántica y lamentar haber tenido algo que ver con ella' o Niels Böhr: 'Cualquiera que no esté disgustado con la teoría cuántica no la ha entendido'. Una teoría complejísima, llena de extrañas paradojas como la del gato de Schrödinger, particulas jugando a ser ondas, experimentos esperando al experimentador, nada es lo que parece en el mundo de la mecánica cuántica.
Semejante teoría, con tantos vericuetos era naturalmente terreno abonado para ingentes cantidades de magufos, engañabobos buscadores de misterios y ovnis, dispuestos a buscar justificación a sus conspiranoias entre las complejidades de una teoría excepcional. Realidades paralelas, universos solapados, todo sirve a estos tunantes para hacer caja con sus rollos.
Una de las grandes embaucadoras, experta en eso de hacer caja, la Puta de Babilonia, tiena cada día menos espacio en blanco para sus maguferías. Cuenta Stephen Hawking que el papa Juan Pablo II le recomendo a la comunidad científica no 'preguntarnos por el principio mismo porque ese fue el momento de la Creación y es obra de Dios'. El avance en las teorias de gran unificación, las TGUs, las teorías de cuerdas, la mecánica cuanto-relativista, en definitiva, de todos los males para la Puta de Babilonia que salieron de la caja de Pandora de Planck y amigos, han llevado al conocimiento científico a sus últimas fronteras. Solo la septillonésima parte del primer segundo de vida del Universo (10 e-43 segundos) está aún a falta de explicación científica. A esa ínfima fracción de segundo se la conoce como el 'Tiempo de Planck' y ese es el minúsculo sitio que les queda a todos estos embaucadores para colocarnos su 'crecepelo divino'.
Stephen Hawking: 'no me habría gustado la idea de ser entregado a la Inquisición como Galileo'
P.S.: El que mejor ha entendido sin duda todas las complejas cuestiones de la relatividad y estas teorias es Woody Allen: '¿Crees que la física cuántica es la respuesta? Porque... no sé, en el fondo, ¿de qué me sirve a mí que el tiempo y el espacio sean exactamente lo mismo? En fin, si le pregunto a un tío qué hora es y me dice "6 kilómetros", ¿qué coño es eso?'
sábado, 19 de abril de 2008
El tiempo de Planck y el gato de Schrödinger
viernes, 18 de abril de 2008
Water Wars, Episodio III: La venganza de los Sís
Corren malos tiempos para la Rebelión. El malvado emperador ZPalpatine ha vuelto a ganar las elecciones gracias a la ETA y el desánimo cunde entre las filas de los defensores de la libertad. El líder rebelde, Mariano Skywalker, se desinfla, se mariacompleja y se convierte en un colaboracionista de los socialdemócratas imperiales. Además le da por nombrar portavoz de la Rebelión a otra modistilla galáctica, la Princesa Soraya Organa, en clara connivencia con el pérfido ZPalpatine, que se harta de poner senadoras embarazadas, jóvenes, o bueno en definitiva mujeres, al frente del Gobierno Galáctico. Los pocos Jedis que quedan, el maestro Yoda Losantos y sus padawanes, Pedrojeta Kenobi, An-son Jin o Burgos Adi Mundi, están espantados por el destino de las fuerzas imperiales en manos de senadoras preñadas. Creen que esto traerá una gran perturbación en la fuerza-s armadas.
Mientras la Presidenta de Coruscant, la lideresa Aguirre, deshoja la margarita de si arrebatar o no a Mariano el mando de la rebelión contra el Emperador ZPalpatine, (para así desde el liberalismo conseguir no ya la rendición, sino su completa derrota como buen emperador terrorista que es), los Lores Sís, caracterizados por decir Sí a todo lo que dice su líder, cosa que harán también naturalmente en cuanto cambie el mandamás, han encontrado un campo de batalla donde hostigar al funesto Imperio socialdemócrata. La venganza de los Sís contra ZPalpatine.
Con la fuerza liberal como aliada, pretenden que el malvado ZPalpatine no confunda, desde el reverso tenebroso, a los ciudadanos diciendo que el trasvase de Barcelona no es tal. Que no engañe a los ciudadanos imperiales diciendo que es agua para beber por una emergencia, que en el borde exterior de la galaxia, en los dominios de Lord 'Forrest' Camps, o el Conde Dooku Valcárcel el agua se necesita para comer. 'Tengo una excelente noticia Lord 'Forrest': Las Water Wars han comenzado'.
Claro que el Emperador Galáctico no lo lleva mejor. Sus aliados de la Federación de Comercio y el Clan Bancario del Planeta Cat-Alunya siguen inflexibles con el bloqueo a Naboo, para mejor exprimir las ubres imperiales, con acuerdos como los trasvases gestados claramente a escondidas de los ciudadanos imperiales antes de las elecciones. No hay mal que por bien no venga, al menos el líder de los separatistas de la Fedearción de Comercio, Nute Montilla Gunray ha afirmado que el Planeta Cat-Alunya tambien es parte del Imperio. Toda una obviedad que parece que solo reconoce casus belli el sibilino Pep.
Entretanto, aquí, en Tatooine, el lugar más alejado del centro de la galaxia, bajo el mandato del todopoderoso Jabba el Hutt, no es que puede que haya restricciones, es que ya llevamos un mes, sin saber ni que ocurre, ni como se pretende solucionarlo o que va a ocurrir cuando la población crezca de forma importante en los meses de Julio y Agosto. Todo un ejemplo de planificación gestado en tres 'gloriosas' legislaturas. Para hacerse una idea de en que manos estamos, no hay mas que ver a los músicos que tocan en la cantina de Mos-Eisley. Total, si no hay agua pero nos quedan tabernas...
P.S.: Hablando del water. El señor Juan Antonio Roca ya está en la calle. Me viene a la cabeza la cita de George Berkeley: 'La ley es una telaraña donde quedan atrapadas las moscas pequeñas pero que atraviesan sin dificultad las grandes'.
jueves, 17 de abril de 2008
Agujeros negros y el 'Penthouse'
Ha muerto, el pasado día 13, John Wheeler, uno de los físicos teóricos más relevantes del medio siglo glorioso de la Física, la primera mitad del XX. Pese a sus muchas aportaciones en el campo de la Física Nuclear, (participó junto a Bohr o Einstein en el famoso Proyecto Manhattan) o como uno de los defensores del 'principio antrópico cosmológico' pasará a la historia por haber acuñado el término 'agujero negro' para definir esas singularidades ultramasivas que engullen todo cuanto se les acerca incluida la luz. Wheeler fraguó el término en su ya famosa conferencia en Nueva York como una de los finales posibles para ciertas estrellas cuyos restos componen esa región destructiva con brutal poder gravitatorio. Un gran científico de esos de los que los medios no tienen tiempo de atender entre gran hemano y gran hermano. Personas cuyo trabajo favorece a millones de personas, que aumentan su bienstar y calidad de vida con lo que se deriva de sus investigaciones y que no merecen la atención de los medios, más ocupados en asuntos de 'gran calado' como 'quién me pone la pierna encima'.
Aunque sin duda el más famoso físico y divulgador vinculado a los agujeros negros es Stephen Hawking. Más allá de los muchos méritos académicos, de investigación y divulgativos que acumula Hawking, lo que más me sorprende es su tremendo sentido del humor, en principio inesperado para una persona que padece una enfermedad terrorífica como la suya, la esclerosis lateral amiotrófica, que tiene su cuerpo físicamente inmovil con una mente activa, lúcida y brillante encerrada en él. Incluso perdió la facultad del habla tras una pulmonía que tuvo que superar con una importante intervención quirúrgica.
Hawking, que ocupa la Cátedra Lucasiana de Matemáticas de la Universidad de Cambridge, en la que le antecedieron Sir Isaac Newton o mi admirado Paul Dirac, ya bromeaba con su cargo, diciendo: 'No pensaba que la silla de Newton funcionase con electricidad en aquella época', jugando con el doble sentido del término chair, (Cátedra y silla) en relación a su propia silla de ruedas.
Pero la anécdota que me sorprendió, cuando leía embobado su libro la 'Historia del Tiempo' y descubrí esta perla:
¿Cómo podríamos esperar que se detectase un agujero negro, si por su propia definición no emite ninguna luz? Podria parecer algo similar a buscar un gato negro en un sótano lleno de carbón. Afortunadamente, hay una manera. Como John Michell señaló en su artículo pionero de 1783, un agujero negro sigue ejerciendo una fuerza gravitatoria sobre los objetos cercanos. Los astrónomos han observado muchos sistemas en los que dos estrellas giran en órbita una alrededor de la otra, atraídas entre sí por la gravedad. También observan sistemas en los que sólo existe una estrella visible que está girando alrededor de algún compañero invisible. No se puede, desde luego, llegar a la conclusión de que el compañero es un agujero negro: podría ser simplemente una estrella que es demasiado débil para ser vista. Sin embargo, algunos de estos sistemas, como el llamado Cygnus X-1 (figura 6.2), también son fuentes intensas de rayos X. La mejor explicación de este fenómeno es que se está quitando materia de la superficie de la estrella visible. Cuando esta materia cae hacia el compañero invisible, desarrolla un movimiento espiral (parecido al movimiento del agua cuando se vacía una bañera), y adquiere una temperatura muy alta, emitiendo rayos X (figura 6.3). Para que este mecanismo funcione, el objeto invisible tiene que ser pequeño, como una enana blanca, una estrella de neutrones o un agujero negro. A partir de la órbita observada de la estrella visible, se puede determinar la masa más pequeña posible del objeto invisible. En el caso de Cygnus X-1, ésta es de unas seis veces la masa del Sol, lo que, de acuerdo con el resultado de Chandrasekhar, es demasiado grande para que el objeto invisible sea una enana blanca. También es una masa demasiado grande para ser una estrella de neutrones. Parece, por lo tanto, que se trata de un agujero negro.
Existen otros modelos para explicar Cygnus X-1, que no incluyen un agujero negro, pero todos son bastante inverosímiles. Un agujero negro parece ser la única explicación realmente natural de las observaciones. A pesar de ello, tengo pendiente una apuesta con Kip Thorne, del Instituto Tecnológico de California, de que ¡de hecho Cygnus X-1 no contiene ningún agujero negro! Se trata de una especie de póliza de seguros para mí. He realizado una gran cantidad de trabajos sobre agujeros negros, y estaría todo perdido si resultara que los agujeros negros no existen. Pero en este caso, tendría el consuelo de ganar la apuesta, que me proporcionaría recibir la revista Private Eye durante cuatro años. Si los agujeros negros existen, Kip tendrá una suscripción a la revista Penthouse para un año. Cuando hicimos la apuesta, en 1975, teníamos una certeza de un 80 por 100 de que Cygnus era un agujero negro. Ahora, diría que la certeza es de un 95 por 100, pero la apuesta aún tiene que dirimirse.
Una suscripción al Penthouse!! Genio y figura.
martes, 15 de abril de 2008
Hablemos de milenarismo...
Me he acordado, no se por qué, de alguno de estos momentos en los que yo por lo menos me he 'descojonado' de risa. Espero que los disfrutéis.
o intentemos la tersera votasion
o comprobemos la dotación de los bomberos
o las historias de Juan y Fernanda
y el sublime Marcial Ruiz Escribano y su 'cuñao el listo'
Buen día a todos
lunes, 14 de abril de 2008
Compañeros de viaje.
Pensaba dedicar hoy, 14 de abril, una amplia reflexión sobre la II República Española. Pero conforme avanzaba el tiempo y pensaba como organizar lo que quería contar en esta tormenta, he ido derivando hacia el humor y la tolerancia, dos valores que bien pueden incluirse en el ideario republicano.
Solo unas cositas:
Que me siento republicano por concepto, por definición y por simpatía. Por concepto porque me parece llevar la democracia hasta el final, por definición porque uno se define también por los valores que comparte y por simpatía por mi afecto hacia todos los vencidos, damnificados infaustamente por una represión brutal más allá de los horrores de la guerra entre los cuales emotivamente me incluyo. Detesto las equidistancias.
Que muchos, casi todos los valores positivos de la República estan afortunadamente recogidos en nuestro actual sistema de convivencia, y no así muchos de sus defectos, lo que me agrada enormemente. La II República es hija de su tiempo, víctima de su entorno y de la convulsiones que vivió el mundo en esos años, pero eso no justifica en absoluto un golpe de estado que condujo a una guerra fratricida y a una dictadura nefasta. Los países de nuestro entorno tambien sufrieron los vaivenes de esas épocas y nadie en su sano juicio podría achacarles un origen democráticamente duduso.
Que odio a quien patrimonializa y absorbe los simbolos y las ideas, vaciándolos de contenido plural, sectarizándolos y atribuyéndose su propiedad y única administración. Los valores republicanos son de todos y precisamente por eso no son propiedad de nadie. Con según que compañeros de viaje no me siento 'republicano'.
Humor y tolerancia. Dejémonos de asuntos tan solemnes y disfrutemos de este momento crème de la crème sucedido en Australia en 2003.
Salud y república.
P.S.: El trompetista se llama James Morrison jejeje, 'pa habernos matao', además se le van un par de plumas soplando el himno. Glorioso.