Como ya hablaba en una entrada anterior, se repite la interferencia de la moral particular de algunos jueces en el ejercicio de su función con indeseables efectos colaterales. No ha tardado en producirse otro ejemplo, como el fallo del TSJA sobre la objeción de conciencia de unos padres a la asignatura EpC. Los movimientos ultraconservadores, (en este caso los demandantes pertenecen al movimiento neocatecumenal, los populares 'kikos') encuentran portavocía y brazo ejecutor en la carrera judicial. Intolerable.
Esto no es sino un paso más hacia la desconfianza de los ciudadanos para con la justicia por estas actitudes proselitistas de algunos jueces y por la miseria con la que los partidos políticos 'mangonean' en los organos de gobierno de los jueces o en tribunales como el Constitucional. Ni los jueces pueden legislar en este país a golpe de sentencia ni los ciudadanos nos merecemos el bochornoso espectáculo de las cuotas de poder en el Tribunal Constitucional -que ha de fallar en temas transcendentes para el país- cuya credibilidad minan sistemáticamente estas actitudes.
Los ciudadanos exigimos una Justicia independiente. Por el bien de todos, de este país y de la calidad democrática de la que hace gala.
http://www.publico.es/espana/056509/sentenciaeducacionciudadaniaforofamilia
http://www.publico.es/espana/056063/varapalo/justicia/andaluza/educacion/ciudadania
VA A CAMBIARSE EL CARACHITO
Hace 10 años
2 comentarios:
Sin duda, estoy de acuerdo con tu articulo. No obstante, hay que ser prudentes. Respetemos la independencia de los jueces, sobre todo, aunque algunas de sus decisiones puedan parecer "extrañas", con el significado que tu le das, y que yo tambien comparto. Al fin y al cabo, la justicia humana es eso, obra humana, y lo humano es imperfecto.
Por cierto, pegame un toque cuando puedas, estoy hecho polvo.
salu2.
Tu siempre tan prudente amigo cornelivs!!. Llevas como siempre razón aconsejando prudencia. Por si mismo este caso no sería mas especial. Pero es la acumulación la que me preocupa.
Te llamaré y hablamos.
Publicar un comentario